Una espectacular ceremonia de color, música, magia y sentido del humor inauguró
los XXX Juegos Olímpicos - Londres 2012. La llama olímpica portada al Estadio de Stratford por Steve Redgrave, fue cedida a 7
jóvenes para encender un
pebetero de 204 pétalos, mientras una explosión de
fuegos artificiales iluminaba la villa olímpica.