El Castillo de Bran es una fortaleza medieval húngara localizada en la actual Rumanía, que goza de gran atractivo turístico por su relación con la novela de Bram Stoker sobre Drácula. Está situada cerca de Brasov en Transilvania, es un monumento nacional y uno de los puntos clave del turismo en Rumanía. Su relevancia proviene de su antigüedad y arquitectura y no del ficticio vínculo con el personaje del conde Drácula, ya que el personaje histórico y real llamado Vlad III Draculea, jamás estuvo en este castillo.